Tras casi 12 meses de formación, el primer grupo de pasteleros de la Academia de Gastronomía UCAB-Plaza’s obtendrá su diploma el próximo mes de julio, mientras una segunda cohorte avanza en sus clases. La directora de LAGA, Mónica Sahmkow, aseguró que los estudiantes han sido capacitados para satisfacer las necesidades del mercado gastronómico local, de la mano de reconocidos profesores
Al calor del fuego, el chocolate se derrite a baño de María y el azúcar se transforma lentamente en caramelo. En las cocinas de la Academia de Gastronomía UCAB-Plaza’s (LAGA), los alumnos de la primera cohorte de la Certificación de Pastelero estudian y practican lo aprendido una y otra vez.
Sus manos ya dominan el arte de medir con precisión la harina para una masa dulce, conocen los peligros de un horno demasiado caliente y reconocen el brillo especial de un buen merengue.
Así se desenvuelven en una de las clases de las asignaturas incluidas en el programa de formación de dos semestres, 698 horas académicas y 200 horas de pasantías.
Los ocho estudiantes, que han dedicado casi un año a explorar técnicas novedosas y perfeccionar sus habilidades culinarias, se preparan para poner a prueba los conocimientos adquiridos y obtener su certificación oficial en julio.
Detrás de ellos, otros 18 alumnos, pertenecientes a una segunda cohorte, continuarán su formación y se graduarán a finales de este año.
Mónica Sahmkow, directora de LAGA, afirmó que, tras más de nueve meses de preparación, los futuros pasteleros han logrado cumplir los objetivos planteados al inicio del programa.
Aseguró que el curso surgió al identificar «una necesidad dentro del mercado» y que los próximos pasteleros podrán demostrar que están capacitados para satisfacer esa demanda del sector gastronómico de Venezuela.
«Desarrollamos un programa completo, que forma desde las bases hasta distintas especializaciones. Creemos que este equipo va a salir al mercado cumpliendo expectativas importantes que hasta ahora no se estaban cubriendo», dijo Sahmkow.
12 módulos teórico-prácticos a punto de caramelo
La certificación de pastelero de LAGA, que comenzó a dictarse en septiembre de 2024, ha sido un espacio académico donde los entusiastas de la cocina con toque dulce han aprendido técnicas básicas de pastelería y panadería, junto con materias complementarias como investigación, química de alimentos y manipulación higiénica para asegurar calidad y seguridad.
Jesús Ascanio, cocinero y pastelero formado en la escuela Le Cordon Bleu de Madrid y Londrés, ha ejercido como docente dentro de la Academia desde enero de 2023. Actualmente, imparte la clase de «Pastelería 1 y 2», guiando a las dos cohortes de pasteleros en formación, entre quienes hay desde adolescentes hasta adultos mayores.
«Lo interesante es que aquí no solo damos lo básico, sino que vamos desde lo más sencillo hasta lo más complejo. Esto meses han sido espectaculares porque muchos de los estudiantes han demostrado muchas ganas de aprender y de destacarse en el mundo laboral», puntualizó.
El chef informó que, como parte del proceso formativo de los ocho pasteleros a punto de graduarse, la Academia LAGA prepara el examen final.
La evaluación de cierre, que tendrá lugar el próximo mes de julio, pondrá a prueba a los pasteleros en un evento similar a la famosa competencia francesa «Copa del Mundo de Pastelería» donde, frente a jurado especializado, deberán diseñar, preparar y presentar una pieza artística de chocolate, un postre de plato y de vitrina.
«No tenemos nada que envidiar a escuelas del exterior, ya que somos una escuela en crecimiento con un programa robusto y un gran sentido de pertenencia nacional», agregó Ascanio.
Andrés González, de 21 años, es uno de los alumnos que hornea con sudor y esfuerzo su futuro como pastelero y que decidió estudiar en la Academia tras su paso por la carrera de Psicología en la UCAB.
Aunque se siente ansioso por la prueba final, aseveró que las herramientas adquiridas en las cocinas de LAGA le han permitido encontrar un camino que ahora reconoce como suyo.
«Siempre he apuntado a algo más profesional, no veo esto como un simple curso, sino como un conjunto de herramientas que podré utilizar cuando tenga mi propia panadería o pastelería. Me he dado cuenta, durante este tiempo, que esto es lo que me apasiona y a lo que quiero dedicarme», expresó González.
Amasando experiencias dentro y fuera de la cocina
La formación en LAGA trasciende los espacios de cocina en el campus Montalbán. Durante el programa, los participantes han realizado visitas a centros de producción y emprendimientos gastronómicos, tales como el Centro de Producción de Tequeños «Las Tías», el Centro de Producción de la Heladería Fragolate y SULÚ Pastelería.
Los futuros pasteleros también han recibido charlas de expertos, como el equipo de Comeflores, quienes les enseñaron sobre las distintas flores que se pueden agregar a los platos.
Para la directora de la Academia, estos encuentros con empresas, proveedores y otros profesionales brindan a los estudiantes la oportunidad de conectarse con el sector en el que se desenvolverán.
Recalcó que desde LAGA trabajan para seguir tejiendo redes que contribuyan con la profesionalización del ecosistema gastronómico nacional, uno de los objetivos que se ha planteado este centro de formación.
«Lo que sí queremos es buscar más aliados y marcas que entiendan el nivel del programa y se quieran sumar, porque eso beneficia mucho a los alumnos. Es importante que los estudiantes aprendan como y con qué poder crear sus propios espacios, para darles la seguridad de que si pueden trabajar en Venezuela y que las marcas entiendan que ya hay un nuevo grupo de jóvenes preparados para trabajar con productos de calidad», agregó Mónica Sahmkow.
Además del manejo de técnicas de cocina, la certificación de pastelero de Laga también contempla formación en el área de gerencia gastronómica, orientada a la administración y dirección de negocios de alimentos y bebidas.
Este módulo fue el motivo principal para que Jenny Valentino, de 55 años, decidiera unirse al programa.
Valentino, emprendedora en repostería desde hace casi una década, sostiene que, además de adquirir herramientas para optimizar la gestión de su negocio, ha aprendido nuevas técnicas que le permitirán mejorar la calidad de sus productos, tales como cultura del vino, nutrición, análisis sensorial y fotografía de alimentos.
«Lo que más me ha inspirado es entender que la pastelería no es solo cocina, sino también investigación y aprendizaje constante. Escuchar las experiencias de los chefs y compañeros me ha nutrido muchísimo. Esto es para quienes realmente quieren estar presentes y aprender, porque es una carrera tan honorable como cualquier otra», dijo Valentino.
Un curso de diseño gastronómico y un congreso: novedades en el horno
Mónica Sahmkow anunció que la academia sigue trabajando en su programación de cursos de corta y mediana duración.
Recordó que, además de las certificaciones de cocinero y pastelero, el catálogo abarca formación para mesoneros, diplomados de comunicación gastronómica, programas en gerencia de restaurantes y cursos de apreciación de vinos.
Entre las novedades, la profesora anunció un intensivo de Diseño Gastronómico, que se ejecutará con el apoyo de la Academia UCAB-Prodiseño.
La directora adelantó que este curso incluirá temas como modelado de chocolate, manejo del color y las formas, técnicas para colocar un postre en el plato, así como el aprendizaje de diseños dimensionales y tridimensionales para «sorprender a los comensales y dejar su propio sello».
Los primeros en integrarse a este programa serán los pasteleros a punto de egresar de la certificación, así como los de la cuarta cohorte de la certificación de cocinero.
«Siempre hemos pensado que la gastronomía no es solo el trabajo en cocina o pastelería, sino un trabajo más profundo: de producto, de país, de ingredientes que te identifican con tu historia y tu espacio. Por eso hemos desarrollado un programa con la Academia de Diseño para enseñar temas de composición, color, texturas y presentaciones . Estos conocimientos que normalmente no se incluyen en este tipo de formación», declaró.
La chef también anunció que para el próximo mes de octubre se realizará la primera edición del «Congreso de Gastronomía UCAB», un espacio dedicado a analizar la actualidad del mundo gastronómico venezolano.
El evento, dijo, también servirá para mostrar los logros alcanzados por la academia en sus dos años de fundación, con el propósito de demostrar que «la gastronomía es un puente interdisciplinar, donde la academia, técnica, ciencias, gestión y cultura se entrelazan. Entonces, tener el nivel académico tan alto tiene la universidad nos inspira a seguir sumado a temas como la economía, salud y diseño para poder ofrecer una oferta interesante», concluyó.
Los interesados en conocer más sobre la oferta formativa de la Academia de Gastronomía UCAB-Plaza’s pueden hacer clic aquí: https://lagaucabplazas.com/
También pueden seguir la cuenta @laga.gastronomia en Instagram.
